En un mercado más libre, los alquileres suben… pero el salario en dólares sube más
La liberalización de las reglas del juego comienza a dar frutos: pese a la suba nominal de los alquileres, su peso relativo sobre los salarios medidos en dólares se redujo, favoreciendo el acceso a la vivienda.
Ciudad de Buenos Aires, 12 de mayo de 2025 – A 18 meses del giro económico que comenzó con la actual administración nacional, el mercado de alquileres en la Ciudad de Buenos Aires muestra señales claras de recomposición, pero también de mayor racionalidad. Si bien el precio promedio de un departamento de 3 ambientes subió un 124% en pesos interanuales, el dato más relevante para los analistas no está en la cifra nominal, sino en su comparación con el poder adquisitivo real: los salarios en dólares crecieron aún más, y por eso el costo del alquiler en términos salariales cayó.
Según un relevamiento realizado por Diego Álvarez Espin, broker de C21 Esposito y autor del blog especializado MercadoInmobiliario.ar, el salario promedio medido en dólares blue pasó de USD 380 en abril de 2024 a USD 720 en abril de 2025, es decir, un incremento del 89%. Mientras tanto, el valor promedio de un alquiler de 3 ambientes subió de USD 520 a USD 685, lo que representa una suba del 32% en dólares, muy por debajo de la mejora del ingreso.
Este cambio de tendencia es el resultado directo de una menor intervención estatal en el mercado, la derogación de la Ley de Alquileres y el retorno a contratos libres entre partes. “Por primera vez en años, los precios se están formando con libertad, sin topes ni regulaciones absurdas, y eso permite un equilibrio más justo entre oferta y demanda”, explicó Álvarez Espin.
Concepto | Abril 2024 | Abril 2025 | Variación |
Alquiler 3 amb. (en ARS) | $220.000 | $493.000 | +124% |
Dólar blue promedio | $420 | $720 | +71% |
Alquiler 3 amb. (en USD) | USD 523 | USD 685 | +31% |
Salario neto (en USD blue) | USD 380 | USD 720 | +89% |
% del salario destinado a alquiler | 137% | 95% | –42 p.p. |
Comentario final:
El sinceramiento del mercado, lejos de perjudicar al inquilino como temían algunos sectores, está bajando el costo real de acceso a la vivienda. La eliminación de regulaciones arbitrarias no solo trajo más oferta al mercado formal, sino que también permitió a los propietarios volver a confiar en el contrato privado. El resultado: menos incertidumbre, más inversión, y una mejora genuina en la relación precio-ingreso.
En un país que empieza a recuperar la confianza en la moneda y en la propiedad privada, el mercado de alquileres se vuelve ejemplo de cómo la libertad económica puede beneficiar a todos los actores.